-Así somos [y mejor que con humor lo digamos nosotras]: ¿Qué tiene el (ciber)feminismo que nos vuelve taradas?, sobre las hermosuras de juntar las gafas violetas con “las gafas de Neo”. O mejor podemos probarnos las gafas de Leslie Jarrin, la ecuatoriana que impulsa un hackeo social. Podemos ir del feminismo a la tecnología y de la tecnología a lo social, como nos lo cuentan en el artículo de Sula Batsú, La incidencia de la tecnología en la sociedad. Pero si esto aún parece tarea difícil, imaginemos cómo es ir desde allí a la tecnología social feminista y ¡autónoma! Aunque eso es lo bueno [y lo complejo] de habitar este ‘sitio en construcción’.

-Y luego vamos y nos encontramos con Algoritmos racistas, machistas y extremistas: ¿se necesita enseñarles ética a los robots? A lo mejor más bien necesitamos menos tecnooptimismo y más sentido tecnocrítico. A lo mejor más bien necesitamos Aprender a navegar libres: «construir autonomía y solidaridad desde el software libre supone estar sin miedo pero en alerta para impedir que se moldee nuestra capacidad de acción y de organización; depender menos de los intermediarios, sobre todo de los que menos percibimos; sabernos cyborgs y no temer a eso, sabernos libres de imaginarnos y hacernos materia en cada acción; y acercarnos a todas las que trabajan detrás para que nuestro sueño de autonomía tecnológica sea posible».

-Así que naveguemos libremente también por nuestros prejuicios y conozcamos Mitos y realidades de la red Tor: Análisis de tráfico en un nodo de salida; las ‘bondades’ [cof-cof] de los datos biométricos: ¿Me protege mi huella digital, o debo yo protegerla a ella?; o la huella ecológica que dejamos al andar: ¿Cómo y cuánto contaminan las búsquedas en Google?, el mayor productor de CO2 del planeta, después de los Estados Unidos, China y la India. Aunque [alerta spoiler], Facebook no se queda atrás: en 2016 la red social azulita “usó aproximadamente el 25% de energía renovable en todo el mundo”. El capitalismo verde y los mercados de carbono, felices…

-Y nos vamos con anuncio propio: llegó el momento del ¡hasta luego! en los Seminarios de Cultura Digital que hemos hecho con tanto entusiasmo esta primera parte del año [así que ya saben, si este miércoles 11 de julio andan por Chiapas, pásense a ver y hablar sobre el internet que queremos con Freenet]; y dos [meta]recomendaciones: el especial infancia y juventud del último #BoletínAntivigilancia con interesantes artículos dedicados al tema y en Esos pequeños cambios tres «datos, relatos, ejemplos demostrativos, contextos de oportunidad» sobre transformaciones sociales a los que vale la alegría adentrarse.

@sursiendo